El sábado fue uno de esos días intensos en los solemos quedar con nuestra amiga E para ponernos al día. Como un cafecito no es suficiente nos dimos una vuelta por el mercadillo Dos de Mayo que coincidiendo con las fiestas de San Francisco gozaba de mucho ambiente por el barrio. Entre ella y nosotros que nos vamos encontrando con alguien cada dos pasos tardamos más de la cuenta en llegar a la barra del Café Bar Nervión a pedir nuestra primera cerveza. Como lo estamos pasando bien nos vamos calentando y ya planeamos comer por algún sitio cercano después de que tomemos la segunda cañeja, esta vez en Marzana 16. Para completar la ruta de Bilbi sólo nos hubiéramos tenido que pasar a saludar a la pareja Atakontu, Ibai y Sara, pero no fue el caso esta vez.
El objetivo era buscar algo bueno, bonito y barato a la par de cercano. Cruzamos la ría y nos dirigimos a Barrencalle, concretamente a la takería TxokoMex. Es de los mismos dueños que el restaurante Al Txile del que ya os hablé. La takería TxokoMex es un rollo más take-away, para comer de pie en el propio local o incluso en el de enfrente llamado La Kantina de Bartolo. También realizan servicios de catering con el que celebrar un cumpleaños en casa como hice yo mismo hace años.
Takería TxokoMex lleva unos cuantos años funcionando pero no sé si es de conocimiento generalizado. Como siempre un vistazo rápido a su carta. La pregunta de siempre: ¿qué son tacos? ¿qué son burritos? ¿estos son los pequeños o los grandes? Somos tres así que decidimos pedir un pack de cuatro tacos (tortilla pequeña) rellenos de diferentes guisos: cochinita pibil (costilla de cerdo), asado de la abuela (guiso casero de cerdo), tinga poblana (pollo) y norteño (ternera). Lo acompañamos además con unas sincronizadas (emparedado de tortillas relleno de ternera y queso fundido) que amablemente nos cortaron en seis pedazos.
Una vez hicimos el pedido cruzamos al otro lado de la calle a La Kantina de Bartolo y allí, sentados junto a la barra, esperamos a que nos llegara la comida.. Mientras tanto un compañero nos fue preguntando qué queríamos beber.
Intenté innovar con una bebida de la que había oído hablar, la michelada. La explicación del camarero no me convenció: «es como una sopa» y «no gusta a todo el mundo». Viendo ahora su ingredientes me parece que no se explico demasiado bien. La clásica michelada es cerveza mezclada con salsa inglesa, salsas picantes y hielo picado. Tampoco suena tan mal.
Siendo unos ‘segurolas’ nos pedimos un botellín de cerveza mejicana Pacífico. Como E iba a tope se lanzó con un cóctel margarita (tequila, jugo limón y triple sec) que me supo suavecito y muy bebible.
Nos pusimos al día y lo mejor de todo es que nos echamos unas cuantas risas entre anécdotas, planes futuros y las rancheras de Vicente Fernández que en la Kantina de Bartolo iban sonando.
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Barrencalle 22, Casco Viejo (mapa botxero)