¡Hola, Botxers!
Pues ya estamos en pleno otoño. Empieza el fresquito, los platos de cuchara, sacamos los abrigos, fiestas americanas con trucos y tratos… Y si te metes en internet para buscar recetas de temporada, encontrarás un montón de ideas con calabazas y setas.
En la sección «Recetas fáciles» de Alma Botxera no queremos ser menos y para la receta de este mes hemos elegido un ingrediente muy otoñal pero le vamos a dar una vuelta y en vez de hacer un plato clásico y calentito, vamos a preparar un aperitivo superrico para que se lo hagas a tu familia y/o amigos en la próxima comida que organices o a la que te inviten.
Hace tiempo descubrí que hacer patés en casa es facilísimo y quedan fantásticos. Puede que no sea la manera más ortodoxa de hacerlos, pero bueno, queda textura de paté, así que yo lo llamo paté. He hecho paté de salmón, de bonito, de anchoas… pero hoy, para hacer honor al otoño, vamos a hacer un paté de champiñones.
PATÉ DE CHAMPIÑONES
Ingredientes
- 400 gramos de champiñones
- 1 diente de ajo
- 1 cebolla
- 150 gramos de queso de untar (tipo Philadelphia)
- 2 cucharadas de aceite
- Sal y pimienta negra
Preparación
Picamos la cebolla y el ajo.
Ponemos en una sartén con el aceite a fuego medio la cebolla unos 10 minutos. Vamos removiendo de vez en cuando.
Mientras, limpiamos bien los champiñones de la posible tierra que tengan y los picamos también. No hace falta que sean trozos super pequeños porque al final los vamos a triturar.
Pasados esos 10 minutos, echamos el ajo picado. 3-4 minutos más.
Añadimos los champiñones y removemos. Echamos sal y pimienta negra un poco al gusto y seguimos removiendo de vez en cuando. Los tenemos unos 10-15 minutos a fuego medio.
Retiramos del fuego. Intentamos quitar todo el líquido que hayan soltado los champiñones, cebolla y ajo. Yo los he pasado por un colador grande antes de pasarlos a un plato.
Esperamos un ratito y, cuando estén fríos, vertemos la mezcla de champiñones, cebolla y ajo en el vaso de la batidora. Añadimos el queso crema y trituramos hasta que quede una masa homogénea.
Y ya estaría. Lo metemos en el frigorífico para que, aparte de enfriar, coja un poco más de consistencia y ya tendríamos un aperitivo superrico para estas comidas y cenas de otoño.
¡TACHÁN!
¡Nos leemos en la próxima receta!