Mira que nos gusta escaparnos a Cantabria cada vez que tenemos un ratito libre. Esas caravanas interminables cada fin de semana de verano son testigo de ello. Nuestros destinos preferidos, ya los sabéis, Castro, Laredo o Noja. Y, ¿Ampuero? ¡Pues a cascarla a Ampuero! El único pueblo de nuestros vecinos al que nadie quiere ir. Aunque solo sea por el popular dicho. 😅
Estamos seguros de que muchos botxers ni siquiera sabrían dónde queda esta localidad. Y es que nuestra famosa coletilla no tiene nada que ver con el pueblo. Ampuero es un pabellón del Hospital de Basurto. Más concretamente el pabellón de enfermos terminales. Así que si te mandan a Ampuero, mal asunto. ☠️
A finales del siglo XIX la población de Bilbao crecía y crecía, y el hospital de Atxuri se empezaba a quedar pequeño. Por lo que se necesitaba otro con premura. Así nació Basurto. Un nuevo hospital que se financió con la aportación de vecinos de la villa. Las familias más poderosas del Botxo contribuyeron con la condición de conseguir ciertos beneficios a cambio. Los más comunes, tener camas a perpetuidad. Incluso se atribuían donaciones de órganos a estos filántropos.🫰🏻
La donación más importante fue la de Doña Casilda Iturrizar, que recibió el nombre de uno de los pabellones. Y Gregorio de la Revilla, que había sido teniente alcalde de la ciudad, se quedó con el nombre del pabellón más grande. 🏥
Se eligió la zona de Basurto por sus abiertos campos y su orientación hacia el mar. El hospital, que hoy cumple años, se inspiró en uno de Hamburgo en el que ya se separaba a los pacientes por enfermedades en diferentes edificios. Toda una revolución. Aunque desde los años 80, todos están conectados por galerías subterráneas. Y en los 90 se integró definitivamente en la red pública de Osakidetza, perdiendo así las familias sus privilegios y apostando por una salud universal para todo el mundo. 🙌🏻
Ahora solo nos falta esperar que nos manden a Ampuero lo más tarde posible. 🙏🏻
