Era cuestión de tiempo que el Copper Deli tuviera su momento en este blog. Cumple muchos de los requisitos para hacerlo: espacio con una cuidada decoración, novedoso y con una oferta cuanto menos atractiva. ¿Y por qué se ha tardado tanto tiempo en tratar sobre este local? Básicamente el hecho de que tras múltiples visitas sigo teniendo la sensación de no haberlo descubierto en su plenitud.
Copper Deli se encuentra en Alameda Mazarredo, en ese tramo que comprende desde la Gran Vía a Jardines de Albia. Es un espacio en el que poder picar algo rápido en ese ‘break’ que nos dan en la oficina, quitar la gusa que produce una ajetreada tarde de compras por el centro o simplemente porque nos da la gana. Copper Deli destaca especialmente por su variedad de sándwiches, sanos y tan apetecibles como el que más. Panes de centeno, salvia o diez cereales de Saturio (Lekeitio) que combinan con ingredientes naturales como rúcula, remolacha, espinacas y calabacín. El emparedado queda completo con más ingredientes: queso de cabra, pastrami, pechuga braseada o el mejor atún del norte.
Mientras escribo me doy cuenta que no han sido pocas las veces que me he pasado por el local. Cuento un par de desayunos con tostadas, una con tomate, aguacate y semillas de sésamo combinada con un café de media mañana. La otra con salmón de Keia, ahumado artesanalmente en Lemoa.
En otra de mis visitas me pedí el sándwich de pastrami, pepinillos & mostaza con pan de diez cereales, de masa madre y cocido en horno de leña (2,75 €/u). Calentito y muy rico, sería por eso por lo que eché en falta algo más de relleno. No me ayuda tener como referencia aquel sándwich de pastrami de Manhattan en el que tuve que desencajar mandíbula. Éste se me hizo a poco, un poco más de mejunge no le venía mal.
La siguiente vez compartí un fundido, otra de las especialidades de la casa. En este caso elegimos el vegetal servido en pan de focaccia con relleno de tomate, calabacín, queso brie y salsa pesto (5,50 €/u). Una buena opción si os acercáis aunque yo me apunto el de pato teriyaki para la próxima.
La carta se completa con varias ensaladas, tablas de quesos o cecina, hummus, nachos y unos patatones con salsas picantes que son las que hacen que aún tenga la sensación de no haberlo probado todo en Copper Deli. He leído comentarios y visto fotos que me han puesto los dientes largos. ¡Hay que probarlas!
Para beber las alternativas bailan desde cafés de diferentes origenes (Etiopía, Guatemala y Colombia), zumos naturales y vinos hasta cervezas artesanas. Van bien surtidos de Basqueland Brewing Project (IPA, Stout, Equinox, Kolsch…), Black Bitch y Dougall’s.
La decoración es otro de sus puntos fuertes: paredes con piedra a la vista y mobiliario de madera cada vez más habituales. Hay detalles que me gustan, creo que marca la diferencia el diseño del logo de los hermanos Arretxabaleta. Me declaro fan absoluto de los trabajos del estudio Hopper Ink. Me gusta la propuesta de Copper Deli, a pesar de que desde fuera prometa ser más acogedor de lo que realmente llega a ser.
Copper Deli
Alameda Mazarredo 6, Bilbao
946 57 08 99
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