Y entre pitos y flautas, festividades y días de labor interminables se me van acumulando los post. Y cada vez me cuesta más dedicarle unos minutos a este blog y sus seguidores. El caso es que tengo pendiente contaros mi última experiencia gastronómica. Ahí va:
Resulta que una de las ventajas de escribir estas líneas es que, en ocasiones contadas, me dan la oportunidad de disfrutar de eventos especiales. El martes pasado me invitaron a visitar de MarisGalicia, la feria del marisco en su cita anual con Bilbao. Se celebra en la plaza de toros de Vistalegre desde el 25 de abril hasta el 18 de mayo por lo que aún estáis a tiempo de visitarla.
Volvimos a hacer del martes un viernes igual que aquella tarde/noche en el GIN SHOW y nos reunimos un cuantioso grupo de blogueros bilbainos para dar buena cuenta de lo que allí se cocía. A las presentaciones pertinentes le siguieron unas cuantas poses para la prensa gráfica. Manuel Gómez director de orquesta de #Marisgalicia nos ilustró sobre las virtudes de los vinos albariño y ribeiro y dimos buena cuenta con la cata de una copita. Continuó el ‘showcooking’ con los trucos de los profesionales a la hora de cocer el marisco, cocinar un suculento arroz, apreciar las empanadas o cocinar un pulpo. Exihición de centollos, bueyes, percebes y langostas que ni olimos ni tocamos (por nuestro bien en el caso de las langostas).
El minutero había dado la vuelta completa cuando los estómagos comenzaban a rugir y nos hacían dudar de si realmente en la invitación leímos la palabra «DEGUSTACIÓN». Habíamos leido bien y ya pudimos ver una mesa preparada para doce comensales donde comenzaron a sacarnos las racioncitas con las que estuvimos vacilando los días previos a amigos y familiares.
Llegaron las primeras raciones: empanadas de atún, mejillones del ártico y un pulpo a feira es-pec-ta-cu-lar. Yo ya podía marcharme satisfecho en este punto pero tampoco iba a dejar pasar la vieira gratinada, los langostinos a la plancha (sosetes) y el arroz con marisco (saladete). Recomendaría afinar un poquito el punto de sal pero mi amatxu me enseñó que «a caballo regalado…» Mientras tanto el albariño corría por la mesa y ayudó a neutralizar el exceso de cloruro de sodio. Las muestras de varios tipos de tarta nos hacía indicar que todo llegaba a su fin pero no sin antes mojarnos los labios con un chupito de licor de café o en su caso de las diferentes variedades de orujo que ofrecen las tierras gallegas.
En definitiva, un placer poder disfrutar del MarisGalicia y agradecido a la organización por invitarme a tal evento. Igualmente un gustazo haber podido conocer y desvirtualizar a los ‘plumillas’ que escriben esos gastroblogs bilbainos a los que sigo: Carolina Bilbao (27, The Black City), el maestro Eneko Sukaldari, Igor Cubillo y Dicky del Hoyo (Lo que coma Don Manuel), Álvaro de (Blog de Bori), Ana Vega (Biscayenne) y Alberto Makusikusi (IgersBilbao). Por proximidad fue con los que tuve más oportunidad de relacionarme en esa ocasión. Espero que vengan nuevas oportunidades.
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Del 25 de abril al 18 de mayo en la plaza de toros de Vistalegre (Bilbao)
Acceso gratuito